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    La Rosa de Bayahíbe: florece en nuestros corazones

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    La Rosa de Bayahíbe, es un símbolo nacional de la riqueza natural y cultural de la República Dominicana


    Por: Aguamiel Mendoza

    Conocida científicamente como Leuenbergeria quisqueyana, este hermoso tipo de cactus florece en tonos rosados vibrantes, es endémica de la región de Bayahibe, donde se encuentra en su hábitat natural.
    La Rosa de Bayahíbe fue descubierta en 1977 por el botánico Alain Liogier, cuyo trabajo ha
    dejado una huella en el estudio de la flora. Además, Liogier, se conoce por haber recolectado
    más de 45,000 ejemplares de plantas en diversas regiones del Caribe incluyendo Cuba,
    República Dominica y Puerto Rico.
    La Rosa de Bayahibe es uno de los pocos cactus que posee hojas, lo que la hace especial dentro
    de su familia, las cactáceas.
    Con su altura que puede alcanzar hasta seis metros, se caracteriza por su tronco cubierto de
    espinas y sus hojas de un verde brillante. Las flores, que emergen en la parte superior del
    arbusto, son un espectáculo visual.

    Sin embargo, a pesar de su belleza, la Rosa de Bayahibe está clasificada como en peligro crítico debido a la destrucción de su hábitat y la falta de polinización adecuada.
    En 2011, fue declarada flor nacional de la República Dominicana. Este reconocimiento de esta
    flor está incluido en los billetes dominicanos, afirmando el testimonio del orgullo nacional y del
    compromiso con su conservación.
    La Rosa de Bayahibe es un símbolo poderoso de resiliencia y belleza que nos recuerda la
    importancia de cuidar nuestro entorno natural.

    Al proteger esta flor, estamos salvaguardando una especie en peligro y asegurar un legado para las futuras generaciones, recordándonos que incluso las plantas más frágiles pueden florecer con amor y dedicación.

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    Por: Aguamiel Mendoza

    Conocida científicamente como Leuenbergeria quisqueyana, este hermoso tipo de cactus florece en tonos rosados vibrantes, es endémica de la región de Bayahibe, donde se encuentra en su hábitat natural.
    La Rosa de Bayahíbe fue descubierta en 1977 por el botánico Alain Liogier, cuyo trabajo ha
    dejado una huella en el estudio de la flora. Además, Liogier, se conoce por haber recolectado
    más de 45,000 ejemplares de plantas en diversas regiones del Caribe incluyendo Cuba,
    República Dominica y Puerto Rico.
    La Rosa de Bayahibe es uno de los pocos cactus que posee hojas, lo que la hace especial dentro
    de su familia, las cactáceas.
    Con su altura que puede alcanzar hasta seis metros, se caracteriza por su tronco cubierto de
    espinas y sus hojas de un verde brillante. Las flores, que emergen en la parte superior del
    arbusto, son un espectáculo visual.

    Sin embargo, a pesar de su belleza, la Rosa de Bayahibe está clasificada como en peligro crítico debido a la destrucción de su hábitat y la falta de polinización adecuada.
    En 2011, fue declarada flor nacional de la República Dominicana. Este reconocimiento de esta
    flor está incluido en los billetes dominicanos, afirmando el testimonio del orgullo nacional y del
    compromiso con su conservación.
    La Rosa de Bayahibe es un símbolo poderoso de resiliencia y belleza que nos recuerda la
    importancia de cuidar nuestro entorno natural.

    Al proteger esta flor, estamos salvaguardando una especie en peligro y asegurar un legado para las futuras generaciones, recordándonos que incluso las plantas más frágiles pueden florecer con amor y dedicación.

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